12 Mar Tus manos: ¿muestran realmente tu edad y tu personalidad?
Tus manos hablan de ti mucho más de lo que crees. A través de ellas los demás pueden saber a qué te dedicas, cuál es tu verdadera edad y hasta conocer algunos rasgos de tu carácter. Son tu mejor carta de presentación y, si las descuidas, pueden mandar un mensaje equivocado. No lo permitas y empieza a cuidarlas desde hoy mismo siguendo estos tips.
Hidratación
Las manos están constantemente expuestas a los factores externos: radiación, frío, humedad… Además, su dermis es enormemente fina y delicada debido a la falta de glándulas sebáceas, por lo que es fácil que se deshidrate y pierda elasticidad.
El mejor remedio es someterlas a una hidratación constante y adecuada a sus necesidades. En todo caso, lo ideal es que siempre lleves contigo una crema de manos -ya sea en el bolso, en la guantera del coche o en la cajonera de la oficina-, para poder dártela siempre que lo necesites.
Truco: Consigue un plus de hidratación aplicándote una crema concentrada antes de ir a dormir y cubriéndola con unos guantes de algodón para favorecer la penetración.
Protección
¡No las maltrates innecesariamente! Protégelas de la radiación usando una crema con FPS durante todo el año, evita posibles abrasiones empleando guantes cuando manipules productos abrasivos (como los de limpieza), prescinde de los secadores de manos… Todas estas pequeñas acciones pueden pasarnos factura.
Higiene
Mantenlas siempre limpias y cuidadas (al igual que tus uñas) para evitar posibles infecciones. Ahora bien, cuando las laves, hazlo siempre con agua tibia o fría (las altas temperaturas favorecen la deshidratación) y usa un jabón neutro que no dañe el pH de la piel.
Recuerda: la humedad es la causa principal de la aparición de grietas y arrugas en las manos. Sécalas muy bien, aunque sin brusquedad, prestando especial atención al espacio que queda entre los dedos.
Cuidados
Exfolia tus manos una vez a la semana para eliminar las células muertas y mejorar la absorción de los productos posteriores. Si quieres darles un plus de hidratación, prueba con una mascarilla para manos o sumérgelas en un baño de parafina. Asimismo, no te olvides de masajearlas con cierta regularidad. Conseguirás que los músculos se relajen y estimularás la circulación sanguínea.